Era sol, su llamada
y no sabía nada más.
Era mal vestido, y profesor díscolo
y nos regaló, su amistad.
Era una versada paloma
y viraba en el aire, cuando dolor causar podría.
Era puerta sin candados
seca madera que arde
o tronco carcomido por la polilla.
Era una cenicienta al final de la octava campana
y no se apresuraba aún.
Era tan pequeña, tan infinitamente pequeña
y se me escurría entre los dedos, igual que el agua tibia.
Extraña tarde, eres
golpeas en mi aldaba y al abrir, no estás
extraño es el rumor de unas olas
de un mar escondido en aquella caracola
extraños, siento mis brazos
porque quieren aletear entre tu plumaje
extrañas que ya no te llame
y no comprendes que no me devuelves el eco de la montaña.
Rugen las balas sobre el asfalto, huele a rueda quemada
chaquetas de cuero, símbolos demoníacos
una ruta, un horizonte, un destino…volver.
No celebras tu festejo, ya no soplas velas
Ni llamas por teléfono, ni gritas mi nombre
Nada se enciende tan vivaracho, eres aún león.
Confluiremos en el recóndito espacio de los túmulos
Silbando aquella canción, donde éramos coreados ladinos
Extraños hacedores de historias, que juegan a crecer
Y muerden el sol al amanecer
Hay una era, que era la damisela del talento
Ahora juega a hilvanar la última curva de un vinilo
que ronronea al ritmo dancístico de una aguja vieja.
En verdad soy tan extraño, es esto tan extraño
o la huella del camino se apega a mi ropa raída
no sé, no importa, juzgar, mas sobre todo disfrutad
os espero en el séptimo cielo, jajaja, me adlanto, byebye.
©Santiago Pablo Romero.Bluesman.
Imagen: JacqPaRo.
Music: The Smiths.Strangeways , Here We come.Full Album.
