lunes, 19 de noviembre de 2012

Arlequín A Cuadros…


Arlequín A Cuadros…
Entre pisadas de polvo y aceras adoquinadas
Una carta ha ido a entregar
Sí señor, el cartero ha llegado a la ciudad.
Crecido niño, de cánticos de orate
Acompañan su melódica implosión.
Llegado entre balones rallados a una mano
De cesta, unidos, y sin meta ni lugar pasa
Une sus esfuerzos, en canchas de alevines,
Amateurs, y ganas de apoyar y divertir.
No tiene suficiente, se rasguea un bluesman
De caminatas errantes, de voraz lengua
Atronando, con su troglo, su socio,y plumilla.
Suenan las sirenas, resquebrajan los sentidos
Han acertado en el corazón de la bestia
Han ido a despertar al leviatán adormecido
Buena señal, se dicen, los quiebros de la noche
Brillan por las luces sobre cazos eternamente llenados de estulticia y depravación.
Se escurre hacia la inocencia, vuelve el niño
Rasga el arlequín traído, saca, emula, enseña
Cada rincón dibujado, fraguado en su interior
Adhesión, tenencia, sapiente paciencia y destreza en el tener, en el dar, en compartir.
Así, sin igual, es nuestro arlequinado en la ciudad, ese ACR, nada cambia, sólo el nombre.
Este recuento, no es más que un paso, al lado
Ni delante ni detrás, sino a su vera.
A cuadros es su interior, a cuadros nos deja
Su generosidad para con los otr@s, así es
Así lo muestra, así lo veo, así lo siento, aunque
Sabe decir No, Y eso nos hace compartir sinos.

sábado, 17 de noviembre de 2012

Cuando Caminas…( A Tod@s...)


Cuando Caminas…( A Tod@s...)
Pie tras pie, sombra y sol, charco o polvo
Cada mañana, tarde o noctámbula noche
Procesión de serpientes, o irredentas mascotas
Mas no todo es serrín y sed
Muchas magines, muchas inercias tendidas
Encuentras, cuando transitas en la arteria de la escarchada cohabitación de human@s.
Sonrisas, besuqueos en las babas a sus mascotas, y de soslayo, miradas acusadoras.
Sí, te atreviste a preguntar, a discrepar,
A dejar ver la posibilidad del yerro.
No, escoria de las atribuladas cloacas, te dicen
Sí, ya, sin decir, pues su sonrisa tapa sus palabras
No atacan de frente, repelen las moscas con guerras de buenas maneras
No quieren perder la oportunidad de soñar con las desavenencias, con las inseguridades, son chacales de incisivos afilados.
Esperan a la madera seca, sí del árbol derribado, por sus artimañas.
Cercenan su más humana careta para bufonear en las terrazas, en las colas, y duermen con guirnaldas de imágenes robadas.
En otro lado del río, las cabañas de la virtud
Se nutren de seres níveos, prístinos, aquellos humanos de especie común, racionales, alegres
Se saben aupados a la vida con más vida.
Amamantan a los descarrilados con las esencias del quiero, del puedo, del estoy.
Ahí estáis, aquell@s que peleáis por fructificar
La necesidad de ver, compartir, sentir, glorificar, deferir, y que saben diferenciar
La belleza en la sonrisa de un niño, en su inocencia, en su plenitud pulcra e inmaculada.
Ahí os quiero, ahí os deseo, ahí estoy, y estáis.
La Gente es extraña, y se disimula el vivir con la necesidad de doblegar hermanos, tristes son.