El Ocaso de los Tabúes…
Querían tela sedosa, para su chaqué
La mejor madera de palo santo, para su efigie
Y la mejor fruta fresca, todo por un puñado de grano
Disconformes nos quedaban las escuálidas fárfaras, a qué
Y el estío trabajó duramente, acrecentó las larvas, inundó
Creando nubes de voladores aguijones y no hubo cedazos
Se habían gastado en velos de regias estirpes y alcobas vacías
En el río seguía creciendo el lodazal, cubriendo los pies descalzos
Intocables señores de pedestales sin palabras, y plúmbea coraza
Horadando sus cimientos, cegados por el brillo áurico de su báculo
No hubo antídoto, morir matando, sin reconocer el descenso
Sin atisbar sus vanos vocablos, sordos de entendederas
La hoguera de palo santo, el pedestal fraguado en llamas vivas
El ocaso de los dioses, en su propia trampa de lujuria y prepotencia, y aún en la pleitesía del vencedor, no respira
Alienta su último respiro en dura confrontación y leña molida
Mas no importa, el aroma impregnado de la combustión maderera de los pedestales, alienta el grito desgarrado del hambriento, se acabaron los Ídolos, es el momento de las Personas.
Cuela tus patas en el baúl y emprende el viaje al otro lado.
JACs, pue no que me ha recordado a un tal Federico, un aleman, digo por el titulo.
ResponderEliminarnos hablas acaso de ocaso de los que ayer casi se quedan marchitos de dolor por no ver colmadas sus más intimas aspiraciones de perdon divino??'. Tal vez no sea así, yo es que tó lo llevo al mismo plano: religión, política,...jeje...
besos rojos, que este es el tercer comentario que te dejo, como no lo admita, me van a oir. En la otra choza imposible entrar.
inma
Ya sabes como las dan las derrotas
ResponderEliminarNada, que se quedan huérfanas
Y las victorias, amontonadas hasta la saciedad
De madres por doquier
Prefieren algún@s el arakiri a compartir el aire…
Bsts Rojilla, siempre un placer, no nos arredramos
Por los impedimentos “ternolojicomentos”…
Como aguijones son algunas de tus palabras que parecen emerger de los mismos infiernos para renacer recrudecidas y algo salvajes,al final casi déspotas,como esos ídolos que...¿no sabes que son de barro?
ResponderEliminarY el barro se derrite con el mismo fuego...por tanto,todo es un círculo:
El de la vida.
Siempre mucha vida en tu vagón,siempre.
Chucuchucuchú!
Me marcho por mis raíles aguijoneados, pero ni loca meto los pies en ningún baúl :)
Y sí...no sé ni lo que digo...
Besos.
Aquí, como no sea echar a que ardan todos los palosantos antes de hacerse negro regaliz pegajoso, de poco nos servirán las hogueras.
ResponderEliminarQuedan dioses para rato.
Y Olimpos, igual
Qué encanto de púas afiladas
ResponderEliminarQué encanto de pies deambulando
Y esperando esos dedos que fetichean
Entre ungüentos y deseos, bella rabia portas hoy, jejeje
Gracias Chucuchú, qué placer…Bsts
La turba no entendió
ResponderEliminarO el hechicero repartió demasiado tiramisú
Y con los dedos pegajosos
No se apunta bien la salida…
No habrá que perder el empeño, de saltiquear…
Gracias MªPili.Bsts
Abajo los ídolos y los iconos que marchitan las entendederas...
ResponderEliminarBesos.
Bellas luces y granate color
ResponderEliminarTanto cuerpo, estilizado y rico
En manjares…
Ays, me hiciste olvidar el pedestal, serás diosa!
Bsts Zarza…Merci…
Traía la muerte de dios anunciado el nacimiento del hombre... pasa el tiempo y en la espera sigo, será que estoy ciega, será que aun no ha ocurrido, será que inventamos nuevos ídolos... de seguro me quedo con tus letras como paliativo.. mil besos amigo mío.
ResponderEliminarY yo, mortal
ResponderEliminarSabiéndome seguro, frente a los inexistentes
Cuidaré la barrare de convencimiento
De los huesos correligionarios
Y seguiré arañando el pliego, dejando mi tinta
Para así tú puedas, sorber mi fluido…
Gracias Europa.Bsts.Mil.