miércoles, 11 de marzo de 2015

Vacuo…

Vacuo…


Hubo un instante
Donde todos estaban, dentro
En mi cabeza
Y nada era imposible.
Mas llegó el olvido seccionador
Sesgando cada trozo
Borrando los recuerdos,
Acometiendo mi cerebro raído
Extirpando lamento a lamento.
Pintando de gris plateado
Nebulosa sin tapujos, ni ornamentos
Acuciando mi vertical
Despojándome de la cordura
Sustrayéndote en mi libro escrito,
A contracorriente muero.
Heme aquí, frente a ella, la mar
Inmensa y tan diminuto soy
Vacuo por fuera y por dentro
Han prorrumpido hacia lejos,
Ya no conozco nada, ni siquiera mi nombre
Sólo sé que te veo escribir
Cual si fuera yo, mas ya no soy.
Apenas queda una vasija hueca
Una piel carcomida por el sol
Preñada de telarañas sin sentido
Y me duele saberte llorando
Por aquello que fui, y nada queda
Resuena la mar, sonajero vacuo
Mas no te recuerdo, repaso tránsito
Mis pensamientos fenecieron,
Tú me regalaste estas líneas
Para dejar una huella sin mordida en el tiempo.

©Santiago Pablo Romero.Bluesman.
Imagen: JacqParo. (Decicado a los enfermos que pierden su memoria, lo más valioso que tenemos los humanos).

2 comentarios:

  1. Heme aquí, frente a ella, la mar….Inmensa y tan diminuto soy…Vacuo por fuera y por dentro…Han prorrumpido hacia lejos,….Ya no conozco nada, ni siquiera mi nombre….Sólo sé que te veo escribir….Cual si fuera yo, mas ya no soy…. Cuanta sensibilidad y tristeza en tus letras, no poder recordar , no poder saber porque la memoria nos abandonó, debe ser horrible pasar por esa etapa, no la he conocido en mi familia pero la he visto en otros, esos seres dejan de ser ellos para convertirse en un cuerpo sin recuerdos, bellísimas pero más que bellas muy humanas tus letras , ….. Al ausentarme, aún fuera sólo en mente…
    A la orilla del adiós... Los recuerdos el tesoro más grande que tenemos, me has sacado el salitre muy temprano, con algo que muchos pensamos que nunca nos puede tocar, un abrazo y tu estarás siempre ahí, escribiendo poemas y mirando el mar, sabiendo quien eres. Precioso enlace.

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  2. “Ya no conozco nada, ni siquiera mi nombre Sólo sé que te veo escribir
    Cual si fuera yo, mas ya no soy, Tú me regalaste estas líneas Para dejar una huella sin mordida en el tiempo”. Cada palabra besa sus versos blues y acaricia su intimidad con sus perlas de sal ante el fantasmagórico olvido, y hace con sus letras el universo de ese amor ante la noche del olvido. Grandiosas auroras de Santiago Pablo Romero poeta, que iluminan esta oscuridad poética, respirando góticos trozos literarios de desierto sin sentido. Un juego de la vida que invita a reírse, disfrutar, para luego quitar todo. Versos que respiran el escape de la cordura, de la historia misma construida con pulsaciones de pasión; se va la vida llevándose el registro de ella misma, y yo asida a tu mano bendiciéndote una por una de tus huellas hasta que de nuevo vibres en ellas. Poeta Caminante Bluesman has escrito con tu corazón este laberinto sin salida, hoyos negros porque así es cuando se pierde la memoria, se pierde un tesoro, pero has dibujado la esperanza del resurgimiento del alma ante la entrega de tus letras, haz vestido tu “Vacuo…” como una estampa grabada de cada palpitar de etapas, centelleando tu ser mismo con ese realismo mágico con sabor eterno, leyendo tu historia, memoria, con tu presente, ayer y hoy milagro de amor…!! Y cuan los grandes “La mirada intramuros” por Antonio Porpetta refleja el olvido, abandono, pérdida del ser mismo. Felicidades poeta Gigante eres, tus versos han abrazado mi alma como otros escritos con tu registro, memorial de vida…!!

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