La Transformación: (Hombre-Persona-Humano)&(Bestia-Gente-Animal)(REP.ELPAIS)

Cuando en el instituto iba leyendo voluntariamente La Forja de un Rebelde, de Arturo Barea. (Recomendable leerlo para refrescar memorias, para los menos leídos, podéis ver la serie montada en TVE a la Carta) forjábame una ligera idea de cómo pueden llegar a ser las personas dadas las circunstancias. Arturo como buen narrador, con el que me identificaba como es natural, es siempre objetivo en la divagación de la historia, de la mala época que le costó vivir. Durante la ruta pudo conocer vividores, adaptadores a la vida, que eran capaces de vender a su padre por unos duros, para putas y demás vicios; pues después como “esmayaos” que son no saben qué hacer con los cuartos más que reventarlos. Así tienes así gastas dicen. Aunque cuando encendió la chispa, la llama tomó forma y logró borrar las mil y una tentaciones que tuvo desde tantos ángulos. (Me recuerda, ahora que está cercano, otro libro Las Tentaciones de San Antonio de G.Flaubert).
Pudo comprobar al igual que yo, como hombres que antes eran, cuando las complicaciones del momento requirió de ellos esa humanidad, se convirtieron en bestias capaces de los más horrendos crímenes. En nombre de lo que les salía del alma, o de los cojones que es lo habitual en estos personajes. 

Los que como Arturo sepamos mantenernos en nuestro sitio seguiremos pudiendo llamarnos personas cuando hablemos con esa gente. Y la parte más importante, algunos llevan ese animal dentro. 
Como cuando crías un precioso doberman o rottweiler, comen de tu mano pero cuando son monísimos, porque cuando ellos toman la posición se comen tu mano, que digo, el brazo.
Por ello os recomiendo esta historia. (Quien no la pueda conseguir que pregunte). Una historia como veis, como millones de ellas. Pensad que si 20 tienen el 80, por algo será.
Pues no sabemos quién creó al primer huevo, pero si sabemos que cuando llegamos aquí todos salimos feísimos, pringados, pero en pelotas. Lo que es demostrable no es discutible.
Así amiguitos, gracias por vuestro tiempo. (No lo digáis por ahí, pero algunos dicen que es Oro).