Púas, semillas, arenas, mar…
Perentoria cae la cosecha de luz
Un incipiente día de frituras con olor a coco
Aderezo de zanahorias destripadas
Sin disimulo se balancea la ola ante la chica semidesnuda
Sabe llamarla, acariciarla, desvestirla de su pudor
Estremecerla como soñarían aquellos dedos serviles
Misterio que nunca claudicara aún mil años dure
Insistiendo en excusarse de otras tantas formas
Lacerando escuelas cerradas tras una tiza disimulada
Licitando ser evas en el paraíso, y no hallar manzanas
Acabar de vivir libre, aunque sea por una jornada
Serenando el ímpetu de ser dios de los océanos
Acaso disimule una sirena, y cabalgue sobre su grupa
Ríe hacia sus adentros, viejo carcamal desvencijado
En un infierno sin puertas, o un paraíso sin escaleras
Nadie escapa al hechizo, niños en sus castillos,
Adolescentes en siluetas perfectas que deciden tostar
Senectudes guardando pliegues a una piel sin aderezos
Meticulosos caballeros en color butano sisean la orilla
Al encuentro de aquellos avezados necios del más allá
Rozan la surrealista paleta de un pintor perdido.
©Santiago Pablo Romero.Bluesman.
Imagen:JacqPaRo.
Acabar de vivir libre, aunque sea por una jornada…Serenando el ímpetu de ser dios de los océanos…Acaso disimule una sirena, y cabalgue sobre su grupa…Ríe hacia sus adentros, viejo carcamal desvencijado…. Nadie escapa al hechizo, niños en sus castillos… Precioso querido poeta como dicen tus letras y ese título que me encanta…
ResponderEliminarPÚAS, SEMILLAS, ARENAS, MAR… así es la vida entre todo eso vivimos…Tras dejar que la semilla te siembre…La arena te acaricie...Y el mar te sane….No queda sino…Púas que inyectan en el alma…. Maravilloso, me imagino que tus bellas letras se quedaron en la arena para deleite de quien las encuentre, un lujo eres, Grande, Inmenso como ese majestuoso mar, un abrazo.
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ResponderEliminar“Púas, semillas, arenas, mar, Acabar de vivir libre, aunque sea por una jornada Nadie escapa al hechizo, niños en sus castillos, Lacerando escuelas cerradas tras una tiza disimulada Licitando ser evas en el paraíso, y no hallar manzanas, Acabar de vivir libre, aunque sea por una jornada”.
ResponderEliminarFelicidades poeta Santiago Pablo Romero por estas letras peinadas con el surrealismo de la vida, ante la quimera del mar de la entrega y la esperanza de vibrar con el maná y formación de la dignidad; versos gigantes que nos llevan a esas huellas ignoradas en la arena dejando el clamor de sus púas. Tu alma de poeta Caminante Bluesman pinta el corazón mismo, de su ausencia de ser, y cual Miguel Hernández: “Ayer amaneció el pueblo desnudo y sin qué ponerse, hay ruiseñores que cantan y en medio de las batallas”. Es así como con tu savia literaria deja el rojizo de las venas de la vida en un “En un infierno sin puertas, o un paraíso sin escaleras”. Siempre abrazas la esperanza con un “cae la cosecha de luz”; tus semillas plenas de cielo son los versos para este Parnaso de las Letras…!!